pienso en ti, tal vez como un enfermo
Soñador que te hizo suya cual ladrón,
de tus besos, tu piel más no tu corazón.
Te amo. Esa es la realidad que me daña;
mis sueños, se enredaron cual telaraña,
con los sentimientos de este ser humano
y marcado la suerte en la piel de la mano.
Alli llevo la inicial de mi primer apellido,
Icono en letra de todo lo que he sufrido;
vinculada tal vez al dolor y al martirio,
por tu abandono, mi lluvia y mi delirio.
Marcado también en el alma ese ícono,
razón además de mi enervado encono,
que derivan en mi desesperada aflicción
pues fuiste dicha y hoy una maldición.
Autor: Camisa
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