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lunes, 30 de abril de 2018

Todo es verdad

Si es verdad…

He tratado de ser fuerte todo este tiempo.

Mas hoy no pude vencer a la fuerza de la gravedad

y las tuve que dejar rodar sin que pudiera detenerlas

en tremenda caída libre a través de mi rostro.

 

Perdón…

Tal vez sea la hora de partir.

no hay razón para quedarse.

 

No pedir disculpas o perdón por tus errores

forma parte de ti, de  formación y tu orgullo

porque para tí tiene justificación

 

Comprendí que es mejor no  forzar,

menos imponer…

mejor dejar  las cosas cual agua de río correr

siempre tengo la mente y mi corazón abiertos

y aunque es duro lo estoy asimilando.

 

¡Por favor Dios no me sueltes de tu mano…!

Dame valor, para seguir y levantarme cada día.

Dame oportunidades de poder ayudar y servir a la gente;

para proyectar todo este amor de mi alma y corazón en ellos.

 

No deseo que nadie más me haga lo mismo;

déjame con mis recuerdos solamente,

que en la medida del tiempo he de sacarle el brillo

a los mejores y a los malos olvidarlos.

 

Si es verdad Dios,

estoy sufriendo,

perdóname por no darle buena vida a este cuerpo

que encargaste a mi alma.

 

Perdóname por arriesgarme a amar como amé.

Gracias por haberme dejado que aprenda

que uno debe de cuidarse de las aguas mansas.

 

Perdón por apagar las esperanzas,

Perdon mi Dios, perdón;

ya luche suficiente,

más te juro que me duele tanto

que no puedo seguir así.

 

Dadme Dios una nueva oportunidad,

para hacer feliz a  ésta alma;

ésta que te pertenece desde hace mucho,

que pretendo entregartela con menos dolor

sirviendo a mas gente.

 

No importa si no es honesta.

Perdón por tirar ese poco de orgullo que me diste

romperlo en mil pedazos,

perdón por mi falta de dignidad,

perdón Dios por humillarme ante el pecado.

Perdón Dios por haberme encandilado

con el café de sus ojos;

cuando debí haberlo hecho de su mirada.

 

Perdón por dejar de creer en ella,

comprenderás que se me  hace difícil

porque es mas que una lucha constante.

 

Gracias Dios por permitirme guardar en mi silencio

su dulce y precioso nombre.

 

Quiero cada día  matar de a pocos

este inmenso amor que siento por ella.

 

Ese amor que me lastima,

que me hace sufrir,

que me angustia,

me apena, me atolondra

y sobre todo me hace sentir

inmensamente triste como hoy.

 

Esta tristeza que siento en mi alma,

como este día gris de verano,

que se va sin alegrías.

 

Esas felices alegrías

que tampoco tuve en el año de verano,

que por el contrario me trajo lluvia, al alma.

Autor: Camisa

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