NUESTRO RECUERDOS PRESENTES

Cuando tus despiertos sueños te regresen al pasado,

y la realidad que miras en tu casa,

te haga recordar aquellas tarde juntos,

regálame un abrazo imaginario,

se que este sentimiento mío,

sentirá ese confort a la distancia.

Hoy recorro aquellos lugares que paseamos juntos,

y el paisaje de ayer se ha borrado, 

como los sueños de amor e ilusión pintamos juntos.

Aquel parque donde me diste un beso,  

con los ojos abiertos, 

en los que jamás debí confiar

existe un bypass  ahora.

Ya no existe el cine ideal o primavera,

cambiaron de propietario y nombre

y existe uno diferente de varias salas en aquel lugar.

Qué bueno que fue así;

duelen menos las heridas

al recorrer aquellos lugares;

porque solo están en mi memoria

y  no hay prueba fehaciente alguna

de lo que un día fue y nunca más será.

Sé que retumba también en tu mente

esos recuerdos cuando llega la tarde

y  comentas con tus íntimos en ocasiones,

recordando que marcabas tu calendario,

para el control amoroso de nuestros días,

el horizonte y nuestro futuro.

La magia se mantuvo controlada,

intacta a lo subliminal, 

que mataba ese calor animal

con la reflexión y la ternura.

Perdón siempre,  por  acordarme de ti….

una lágrima no significa nada,

que mis ojos sean un rio naciente

tampoco es nada…
que cuando joven pensaba y sentía,

mi deseo que seas siempre  feliz…

y no me importo si fuera lejos de mi….

Hoy pienso que estuve equivocado…

porque a pesar del tiempo y la distancia, 
no he dejado de amarte, ni recordar
tu dulce sonrisa, tu tierna voz y tus carcajadas.

El pueblo donde vives lo miro desolado,
como si le faltara esa belleza que veía 
cuando te visité por allí por tu domicilio.

Se han avejentado tanto sus calle 
que rompe el alma verlo sin cambios.

lo veo muy abandonado 
sin que las casas al menos se hayan pintado…

Es como si desde la fecha que deje de  ir a verte

se haya dejado el pueblo morir en el tiempo….

Pude verte a lo lejos  y brillaron de ilusión mis ojos

a punto que controle mis ganas de correr y abrazarte

más solo exploto la diáfana fuente de mi rostro,

que los nublo con ese transparente rocío humano.

Pero ya  a espalda tuya vi tus canas

y atine a decir: Gracias Dios….

por tal vez ésta última visita en tantos años.


Autor: camisa